Desde el pasado 15 de noviembre las obras fueron clausuradas simbólicamente por universitarios y ciudadanos, al ser destruida la casa del fundador del barrio del Artista, José Márquez.
Incluso, el doctor en Historia del Arte, Francisco Javier Fernández Tello, miembro del Comité Defensor del Patrimonio Histórico Cultural y Ambiental de Puebla, acusó que el gobernador Moreno Valle, en su afán de promocionar su figura a nivel nacional, esté destruyendo Puebla, con el argumento de la modernización y de un supuesto atractivo turístico.
Explicó, a la prensa, que para atraer turismo no se necesita la modernidad, sino que debería haber un Proyecto que resguarde la fisonomía de la ciudad que es Patrimonio Histórico de la Humanidad. “Se admira lo histórico, no un pedazo de metal colgado con cables de acero”, dijo.
Como ya se comprobó en los tribunales, la casa estaba catalogada a nivel federal y protegida por la ley, pero desafortunadamente se ha destruido por los burócratas del gobierno.
“Los argumentos del gobierno son totalmente inválidos, como el que dicen que el inmueble sufrió modificaciones en su interior, de que ya no tenía valor histórico, pero ellos NO son los que le dan este valor, es el tiempo, la época, los hechos históricos sucedidos, además hay una ley y un catálogo, así como un conjunto de especialistas universitarios que sabemos del tema y de la urbanización de la ciudad. La ciudad NO es de los políticos, de los partidos, de los grupos de poder, la ciudad es de los ciudadanos, por eso la defendemos, como hoy hacemos.
”Nadie puede cambiar el uso de suelo en una zona de monumentos y menos destruirlos, es una anomalía sumamente grave que viola hasta tratados internacionales en torno a la protección de este tipo de zonas.
”Las autoridades creen que la ciudad es de ellos y que pueden hacer lo que quieran (...), están pensando como en el siglo XIX, cuando tirar monumentos por la modernidad era lo que se hacía, con este criterio destruyeron bellos altares barrocos de iglesias, como la de san Juan de Dios en la calle 5 de Mayo.”
Por su parte el arquitecto del INAH, Ignacio Ibarra, explicó la importancia histórica del inmueble, tanto en su estructura como en lo que representaba para la ciudad de Puebla.
“Es una agresión al patrimonio cultural de la ciudad, Puebla tiene zonas muy definidas, protegida por la ley federal de monumentos”, indicó el profesionista.
”El problema es que hay una ignorancia absoluta de leyes locales, federales y tratados internacionales.” También hay intereses de hoteleros y restauranteros para atraer turistas de forma salvaje, ese tipo de turismo, solo destruye el patrimonio edificado, no conviene a la ciudad.
Cabe recordar que el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS, por sus siglas en inglés) demandó en su reunión cumbre realizada en París, Francia, detener las obras del
teleférico.
Georgina Ortega Cambranis, coordinadora del organismo en México, informó que el escrito fue presentado por Belem Oviedo Gámez, vicepresidente del organismo en México, ante la reunión en la que intervienen representantes de la Unesco.
“Lo que no dice el gobierno es que al reconstruir la casa también levantará una torre cuya altura y cimentación rebasan las normas internacionales de conservación del paisaje. No se debe rebasar la altura de la torre de la iglesia más alta de la ciudad. Esta estructura impactará de manera irreversible en el paisaje histórico de la zona de monumentos.”(DIARIO INTOLERANCIA/PUEBLA). Enviada por COLECTIVO UNIVERSITARIO BUAP.
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