PUEBLA, Pue. (apro).- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en coordinación con el Consejo Nacional de Monumentos Históricos, hará una consulta ciudadana para definir la suerte del proyecto de teleférico que inició el gobierno estatal en esta ciudad.
El perito de la delegación INAH-Puebla, Sergio Vergara Berdejo, informó que este acuerdo fue notificado por las oficinas centrales del instituto, cuyas autoridades serán las encargadas de llevar a cabo la consulta ciudadana para resolver la controversia que se ha desatado por la construcción de un teleférico en la zona de monumentos de esta ciudad.
“Se hará una consulta ciudadana para definir si se continúa con el teleférico o ya no. La consulta la mandará directamente la oficina central del INAH en México”, precisó el funcionario.
De acuerdo con columnistas locales, fue el propio gobernador Rafael Moreno Valle quien propuso al INAH la realización de esta consulta para zanjar el entrampado en el que se encuentra la administración estatal con esta obra.
Actualmente, la construcción del teleférico se encuentra suspendida por un amparo que otorgó el Juzgado Cuarto de Distrito al Comité Defensor del Patrimonio Histórico, Cultural y Ambiental de Puebla y a la Fundación Manuel Toussaint.
En los juzgados, los académicos que conforman esas agrupaciones presentaron un oficio emitido por la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos en el que se confirma que el gobierno del estado empezó a construir el teleférico sin la autorización del INAH.
Además, quedó claro que tampoco el gobierno de Moreno Valle contaba con permiso para demoler la
casa ubicada en la calle 8 Norte 414, en el tradicional paseo conocido como el Barrio del Artista, que está incluida en el catálogo de inmuebles protegidos y en el decreto de 1977 para la Declaratoria de la Zona de Monumentos Históricos.
La orden del juzgado de suspender la obra se emite cuando el gobierno de Puebla ya tiene avanzada la edificación de cinco torres que servirán para sostener el cableado y como terminales del nuevo atractivo turístico.
Incluso, en el Barrio del Artista, donde antes se encontraba la Casa del Torno, construida entre los siglos XVII y XVIII, ahora se puede observar bloque de cemento
casi de las mismas dimensiones del inmueble destruido. El plan es que en ese lugar se construya una terminal del teleférico cuya altura alcanzará los 70 metros de altura.
Sonia Espinosa Martínez, presidenta del Comité Mexicano para la Conservación del Patrimonio Industrial (CMCPI), reprobó que se pretenda dar una salida política a las autoridades estatales en lugar de que el INAH aplique la ley en protección del patrimonio cultural y arquitectónico de los poblanos y de México.
“El patrimonio no se negocia”, sentenció la académica, quien consideró que de aplicarse la ley el gobierno de Puebla estará obligado a desmontar las estructuras metálicas que ya tiene en pie, así como a restituir la casa que derribó en el Barrio del Artista.
También dijo que el INAH y el ayuntamiento de Puebla tendrían que proceder legalmente contra los funcionarios responsables por la destrucción del inmueble.
Lo que se busca, insistió, es “evitar que se destruya lo que han hecho otras generaciones, lo cual es fundamento histórico y potencial de desarrollo de los habitantes, pues su valor como patrimonio cultural es algo no renovable y genera no sólo permanencia del arraigo, sino la llegada de turismo con recursos económicos”.
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