lunes, 25 de junio de 2012

"NO ME VA A TEMBLAR LA MANO ABATIRÉ LA CORRUPCIÓN EN MÉXICO"


VERACRUZ, Ver.- Aunque no va a ser fácil, "porque la mancha negra de la corrupción ha crecido mucho", Andrés Manuel López Obrador, candidato del Movimiento Progresista a la Presidencia de la República, refrendó aquí su determinación para abatir este mal que corroe las entrañas de la vida pública de México. "Vamos a acabar con la ratería; tengo convicciones, ganas y autoridad moral; ¡no me va a temblar la mano!", enfatizó. Después de señalar que los malos gobernantes quisieran que todos los mexicanos formen parte de la corrupción, ofreció rescatar el valor del precepto honestidad. "Vamos, dijo, a establecer la honestidad como estilo de vida, como forma de gobierno". Ante miles de veracruzanos que colmaron la Macroplaza del malecón porteño, en presencia de los dirigentes estatales de la coalición Movimiento Progresista, Movimiento Ciudadano, PRD y PT, Andrés Manuel López Obrador reiteró que el objetivo principal de la lucha que encabeza es transformar la vida pública de México de manera pacífica, sin violencia, con la participación consciente y decidida de los ciudadanos, de mujeres y hombres de todo el país que, "como ustedes, buscan que las cosas mejoren en beneficio de las mayorías".

el movimiento de los jóvenes. Pensaron que estaban dormidos, apáticos, que nos les importaba la amarga realidad que está viviendo el país. Y nos han puesto su ejemplo. A partir de entonces, aseveró el candidato presidencial, las cosas empezaron a cambiar todos los días. Luego, cuando vieron que se desinflaba Peña Nieto, sus estrategas todavía fueron a Guanajuato, a pedirle a Vicente Fox que dijera que había que estar con el puntero. "Y Fox cometió la canallada de darle la espalda a su partido, a la candidata de su partido, a muchos ciudadanos de buena fe. ¡Qué vergüenza terminar pidiendo el voto por el PRI!". Luego de aseverar que Vicente Fox ya tiene asegurado un lugar en el basurero de la historia, Andrés Manuel López Obrador dijo que sus adversarios están muy nerviosos porque mientras Peña Nieto está cayendo en picada, "nosotros vamos para arriba". Al recordar que hace unos días los gobernadores del PRI recibieron instrucciones para "aportar" votos, los exhortó "en buena lid, de buena fe", particularmente a Javier Duarte, gobernador de Veracruz, que lo piensen más de una vez porque la mancha de un fraude no se quita ni con toda el agua de los océanos. Finalmente invitó a los veracruzanos a prepararse para votar con libertad, a estar pendientes y a cuidar los votos. "Voten por quien les dicte su conciencia; que nadie acepte ser esclavo, que nadie venda su libertad". La noche del primero de julio próximo, anticipó, "va a haber fiesta cívica nacional; vamos adelante con mucha fe, con entusiasmo y con la moral en alto".

En otra parte de su vigoroso mensaje, Andrés Manuel López Obrador se refirió al grupo minoritario que integran quienes se creen amos y señores de México y no quieren ningún cambio. "Ellos, aseguró, fueron los que nos atajaron, nos cerraron el paso en el 2006, y miren los resultados: si antes todo iba mal, ahora todo ha empeorado. Y si ese grupo no nos hubiera bloqueado en el 2006, México no hubiera estado así después." Explicó que después de ese fraude decidió continuar con la lucha. "No transamos, no cedimos, no claudicamos, y ahora estamos ante esta oportunidad inmejorable para lograr la transformación del país".



Los que mandan, afirmó AMLO, los titiriteros que mueven los hilos y están en la cúpula del poder económico, político y mediático, fueron quienes decidieron hace poco que se diera una operación de recambio en el poder, porque mandan por igual en el PRI y en el PAN y usan a esos partidos de acuerdo a lo que les conviene. Se dieron cuenta, agregó, de que el PAN ya no les iba a funcionar, y empezaron a proyectar el regreso del PRI a la Presidencia de la República, a Enrique Peña Nieto, a introducirlo en el mercado como se introduce a un producto chatarra. Y lo inflaron. Ese era el plan, pero ya fracasó, aseguró López Obrador; no les funcionó, entre otras cosas, porque hace 40 o 45 días surgió un movimiento que fue un despertador de conciencias:

Pidió confianza y ofreció no traicionarla, porque sería una infamia. "Como me quieren, dijo a la multitud, así los quiero yo. Y amor con amor se paga". Antes, al recibir a López Obrador en la Macroplaza, el dirigente de Movimiento Ciudadano en el estado y candidato a diputado federal, Cuauhtémoc Pola Estrada, afirmó en breve mensaje que los veracruzanos están hartos de gobernantes corruptos e ineficaces, y lo que quieren es el cambio verdadero. Los veracruzanos, enfatizó, quieren la transformación del país y del estado. Finalmente llamó a los indecisos, a quienes no saben por quién votar, que apoyen a quien es un auténtico líder, Andrés Manuel López Obrador, "porque votar por el PRI es regresar a lo peor de nuestra historia". Con Andrés Manuel estuvieron los dirigentes de la coalición Movimiento Progresista en el estado de Veracruz: Cuauhtémoc Pola Estrada, de Movimiento Ciudadano; Juan Vergel Pacheco, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Vicente Aguilar Aguilar, del Partido del Trabajo (PT), así como el senador Dante Delgado Rannauro, coordinador de la campaña de Andrés Manuel López Obrador en la primera circunscripción electoral.

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